El científico mexicano creador del vehículo autónomo llamado “AutoNOMOS”, Raúl Rojas González, expuso hoy aquí que este tipo de unidades motrices podrían utilizarse en las ciudades posiblemente para el año 2040.
Al impartir una conferencia a estudiantes y académicos del programa de Ingeniería en Sistemas de la Información de la Universidad de Sonora (Unison) expuso que empresas automotrices ya trabajan con esa tecnología.
El catedrático mexicano de inteligencia artificial y robótica en la Universidad Libre de Berlín, Alemania, habló sobre su experiencia con este automóvil, el cual se dirige a Estados Unidos.
Mencionó que algunas empresas automotrices trabajan para que esta tecnología pueda ser comercializada para autos en carretera en el año 2020, principalmente en Estados Unidos, Alemania y Japón.
Anotó el científico egresado del Instituto Politécnico Nacional (IPN) que posiblemente para el año 2040 o 2050, los vehículos autónomos puedan usarse en la ciudad de forma masiva.
Comentó que el “AutoNOMOS” forma parte del proyecto “Espíritu de Berlín”, que contiene una serie de desarrollos tecnológicos útiles para la industria automotriz, como este primer auto alemán no tripulado.
Rojas González dijo que es un vehículo convencional de gasolina que cuenta con una computadora que puede recibir la medición de sensores y de acuerdo con esos datos, el ordenador puede frenar, acelerar y mover la dirección para que el vehículo avance.
El auto tiene una serie de sensores, nueve cámaras de video que cubren 360 grados, tres láseres y radares en las esquinas, al frente y en la parte trasera para detectar los automóviles en la carretera.
Asimismo, está equipado con una unidad GPS que da la posición del vehículo en la ciudad y en la carretera, así como una electrónica jerarquizada que hace posible que la inteligencia de manejo sea controlada a través de una laptop.
Cuenta además con tres controles remotos a través de una tablet, para arrancar y parar el automóvil, un control de largo alcance de cinco kilómetros de distancia y el del propio automóvil, abundó.
Calificó el auto como un “laboratorio en movimiento” que después de probarlo en Alemania, Suiza y Estados Unidos decidió hacerlo en México y para el recorrido se generó un mapa en tercera dimensión del trayecto de Nogales, Sonora a la Ciudad de México.
Es la cuarta vez que el auto pasa por Hermosillo, luego de iniciar el recorrido el 1 de septiembre al recorrer desde la frontera de Nogales a la capital del país y posteriormente se regresó para recorrer la misma ruta de manera automática, explicó.
En esta ocasión, añadió, el vehículo se dirige a Estados Unidos para regresarlo a Alemania, en tanto que los datos recopilados en el primer trayecto se enviaron a Alemania, donde se generó el mapa.
“Fueron más o menos dos semanas de cálculos y verificación manual, y ya el 14 de octubre salimos de Nogales para llegar a la Ciudad de México”, mencionó.
En el recorrido el auto contó con un conductor de seguridad y un acompañante encargado de monitorear la computadora, requisitos necesarios que les pidieron para otorgarles la licencia en Alemania, que se logró luego de un periodo de pruebas de 18 meses.
La idea de tener autos que se manejaran por sí solos data desde hace cien años y creció en los cincuentas y sesentas, pero en esa época no existían los sensores ni la electrónica con que ahora se cuenta y con las computadoras modernas es posible realizar ese sueño.
Sobre la utilidad del vehículo autónomo, el científico mexicano comentó que la ventaja es que quien lo usa puede hacer otras cosas y en un futuro podría ser una forma de compartirlo como un complemento del sistema de transporte y con ello reducir el número de autos.
NTX
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