Las autoridades mexicanas suspendieron temporalmente a la empresa de vuelos chárter que poseía un avión de pasajeros que se estrelló en Cuba, mientras que los medios cubanos dijeron que uno de los tres supervivientes murió el lunes, lo que aumentó el número de muertos a 111.
La Dirección General de Aviación Civil de México dijo en un comunicado que se ordenó la suspensión para permitir una revisión “extraordinaria” para verificar si Aerolineas Damojh, que usa el nombre comercial Global Air, está cumpliendo con la ley.
Las autoridades también quieren recopilar información para ayudar con una investigación lanzada por el gobierno cubano sobre la causa del accidente del viernes.
Las estaciones de radio y televisión estatales cubanas dijeron que Gretell Landrove Font, de 23 años, murió el lunes por la tarde de lesiones extensas que sufrió en el accidente.
La madre de Landrove, Amparo Font, había dicho a los periodistas que su hija era una bailarina de flamenco y estudiante de ingeniería a punto de graduarse.
Los dos supervivientes restantes, Mailen Díaz, de 19 años, y Emiley Sánchez, de 39, fueron hospitalizados en La Habana en estado crítico. Ambos son de la ciudad de Holguín, en el este de Cuba.
México y la Junta Nacional de Seguridad en el Transporte de EE. UU. Han anunciado que enviarán expertos a Cuba para ayudar en la investigación, y La Habana dijo que Boeing, que hizo el avión, participará.
El Boeing 737 de 39 años fue alquilado a Damojh y operado por la aerolínea cubana estatal Cubana de Aviación, con una tripulación de vuelo de Global Air.
Se estrelló en una bola de fuego justo después del despegue el viernes desde el aeropuerto internacional de La Habana con destino a la ciudad de Holguín, en el este de Cuba.
La dirección de aviación de México dijo que la compañía había sido suspendida dos veces antes, en 2010 y 2013, pero que se le permitió reanudar las operaciones luego de abordar las cuestiones de seguridad.
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