Investigadores alemanes encontraron una manera inteligente para medir con mayor exactitud las emisiones de los vehículos en marcha, lo que permitiría saber rápidamente cuáles son los automotores más contaminantes e impedir su circulación.
Preocupados por la insuficiencia de las pruebas estándares de laboratorio sobre las emisiones, tras el escándalo Volkswagen, un equipo de científicos de la Universidad de Heidelberg, Alemania, decidió buscar la forma de obtener datos más fiables.
Encontraron que la manera más eficaz de hacerlo era “seguir” a los coches y autobuses en circulación para “oler” los gases que salen de su tubo de escape.
“Es muy simple”, afirma el equipo y explica que se trata de un pequeño instrumento al cual “entra” el humo que despide el automóvil que va adelante y procesa los datos, mientras que un GPS rastrea su ubicación y una cámara identifica el tipo de vehículo y el fabricante.
Los investigadores, quienes presentaron su propuesta en la reunión de Geociencias de la Unión Europea, están particularmente interesados en los óxidos de nitrógeno, que se producen en el proceso de combustión y pueden ser un peligro para la salud.
Durante dos años, los científicos “persiguieron” vehículos automotores por las calles de varias ciudades alemanas, obteniendo resultados a menudo bastante sorprendentes, con una gran variabilidad en las emisiones.
Aunque en general los modelos más recientes tuvieron las mediciones más limpias, ésto no siempre resultó así pues algunos resultaron altamente contaminantes pese a que habían sido fabricados para cumplir con los últimos estándares de emisiones.
Esto puede indicar fallas en los sistemas instalados en estos vehículos para limpiar los gases del tubo de escape, señalan los investigadores y agregan que los mayores niveles de contaminación emanaron de los autobuses, en particular los modelos más antiguos.
Los datos obtenidos por el instrumento en cuestión revelaron que “sólo un número relativamente pequeño de vehículos en marcha es responsable de una gran parte de las emisiones totales”, puntualizan, citados por la cadena pública de noticias BBC.
Si se detectan a los automotores que emiten mayores contaminantes y se les impide la circulación, las emisiones se reducirían en 45 por ciento. “Si se excluye sólo a los grandes emisores, habría un gran impacto positivo en la calidad del aire”, sugieren.
NTX
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