Charlie Gard, bebé de once meses cuyo caso conmovió al mundo por una batalla legal sobre su supervivencia, murió este viernes, según informaron sus padres.
Chris Gard y Connie Yates tuvieron una batalla legal de cinco meses para salvar la vida de su hijo por una enfermedad rara que tenía que sólo han registrado en el mundo 16 veces que “priva de la energía necesaria para vivir”, según explicaron médicos.
Se trata de un síndrome de depleción del ADN mitocondrial en el gen RRM2B que “priva de la energía necesaria para vivir” al bebé.
Doctores ingleses se negaron a seguir el tratamiento pues no conocen cura para este padecimiento, y ante la corte inglesa declararon que el bebé ni se mueve ni oye y “sólo sufre innecesariamente”.
Médicos recomendaron desconectar al bebé, quien nació en buen estado de salud pero a los pocos meses empezó a sufrir el síndrome.
A nivel mundial trascendió el conmovedor caso y la intención de sus padres de buscar salvar la vida de su bebé ante un padecimiento raro que a la fecha no tiene cura.
Al negarse los médicos de Londres de atender a Charlie Gard, Donald Trump, presidente de Estados Unidos,se ofreció a ayudarlo como fuera posible.
Este lunes dejaron los padres la batalla legal y dejaron el hospital Great Ormond Street para llevarlo a Estados Unidos a un tratamiento experimental, aunque reportaron que ya murió el bebé Charlie Gard de once meses.
Los padres llevaron este jueves pasado a Charlie a un hospital que permanece anónimo; pero murió al día siguiente.
“Nuestro hermoso niño se ha ido. Estamos muy orgullosos de ti, Charlie”, declaró Connie Yates en un mensaje oficial.
El niño recibió apoyo de un grupo que se formó bajo el nombre de “El Ejército de Charlie”, quienes recaudaron 1.35 millones de libras esterlinas para lograr un tratamiento efectivo.
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