El magnate mexicano, Carlos Slim, uno de los hombres más ricos del planeta, sufrió un revés por parte de la justicia de Panamá, después de que un magistrado ordenara el embargo de diez de sus propiedades en el país centroamericano por abuso de poder, espionaje industrial, competencia y diversas irregularidades, aunque dichos delitos aún están por confirmarse en un proceso legal.
Acorde con al dictamen emitido por el juez quinto de Circuito de lo Civil de Panamá, Juan Bosco Molina Rivera, las propiedades a ser embargadas son seis fincas en Chiriquí, dos en Panamá, un departamento en la capital y la central hidroeléctrica localzaida en Bajo de Mina, como consecuencia del pleito legal iniciado por el empresario Julio César Lisac Jiménez.
Cabe señalar que el hombre de negocios de origen libanés arrancó una denuncia por las supuestas concesiones entregadas a Carlos Slim por parte del gobierno del ex mandatario Martín Torrijos, quien habría favorecido el despojo de una licitación para la explotación hidroeléctrica a fin de entregársela al magnate mexicano, quien recientemente dijo que es necesario atacar la pobreza para hacer crecer la economía.
“Los que se presentaron primero como potenciales asociados y luego interesados compradores se convirtieron, en menos de un año, en quienes se hicieron cargo de la concesión, que la Autoridad de Servicios Públicos de Panamá (ASEP) le retiró a Lisac tras no concederle una extensión solicitada de cinco meses para empezar las obras , cuando ya habían firmado el contrato de concesión de generación de energía”, dio a conocer el diario local La Estrella.
En meses anteriores, el magnate mexicano, Carlos Slim, se pronunció a favor de una semana laboral de tres días, poco tiempo después de ser galardonado por filántropo, gracias a sus acciones para impulsar el desarrollo social en algunas regiones donde sostiene negocios.
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