Un muerto y 120 heridos en una violenta protesta ultraderchita frente al Parlamento en Ucrania
El ministro del Interior ucraniano, Arsen Avakov, informó que de los 122 que fueron hospitalizados, al menos 11 estaban en estado crítico, y que 30 de los manifestantes que protestaban frente al Parlamento fueron detenidos por el ataque en contra de una reforma que da más autonomía a regiones separatistas del país, escribió en su página de Facebook.
Avakov denunció además que muchos de los manifestantes, incluidos algunos de los detenidos, vestían remeras y llevaban banderas del partido de extrema derecha Svoboda, que acusa al gobierno de ceder soberanía ante los separatistas y de capitular ante Rusia, a la que Kiev acusa de apoyar a los rebeldes.
La reforma establecerá una descentralización del poder político de Kiev y una mayor autonomía para las regiones, entre ellas las provincias orientales de Donetsk y Lugansk
Esta fuerza ultranacionalista funcionó como uno de los grupos de choque durante el levantamiento pro occidental en la plaza Maidan y el posterior derrocamiento del presidente pro ruso Viktor Yanukovich en febrero de 2014, que a la larga derivó en el conflicto con los separatistas del este rusoparlante.
Como una de las fuerzas victoriosas del movimiento pro europeo y anti ruso del Maidan, importantes referentes de Svoboda ocuparon cargos claves como el de viceprimer ministro, ministro de Defensa y fiscal general durante el gobierno de facto que dirigió el país hasta las elecciones legislativas de fines de 2014.
Además, Svoboda, junto con otra fuerza ultranacionalista y neonazi, Sector de Derecha, se convirtió en una de las principales fuentes de combatientes para nutrir la nueva Guardia Civil y los grupos paramilitares que reforzaron al poco profesional Ejército que pelea para recuperar el control de dos provincias del este del país de manos de milicias separatistas pro rusas.
Por eso, el presidente ucraniano, Petro Poroshenko, calificó al ataque en la puerta del Parlamento como “una puñalada en la espalda”, en un mensaje televisado, según informó la agencia de noticias rusa Sputnik.
En un comunicado publicado en la página web de la Presidencia ucraniana, Poroshenko acusó directamente a Svoboda, al partido Radical, otra fuerza que multiplicó su apoyo electoral por su protagonismo en el levantamiento popular de Maidan, y a una nueva fuerza de extrema derecha conocida como UKROP.
“No sólo los responsables materiales serán condenados. No sólo los que usaron granadas, armas automáticas y bates de béisbol, pero también los que organizaron y los responsables políticos”, prometió el mandatario.
Hasta el momento las autoridades ucranianas informaron que una granada fue lanzada desde la pequeña multitud que desde temprano se concentró frente al Parlamento nacional en Kiev para protestar contra una reforma constitucional que impulsa el gobierno de Poroshenko y sus aliados internacionales, principalmente la Unión Europea (UE) y Estados Unidos.
La reforma establecerá una descentralización del poder político de Kiev y una mayor autonomía para las regiones, entre ellas las provincias orientales de Donetsk y Lugansk, controladas en parte por milicias separatistas pro rusas desde abril de 2014.
“No sólo los responsables materiales serán condenados, sino también los que organizaron y los responsables políticos” Petro Poroshenko, presidente ucraniano
En febrero pasado, el gobierno de Poroshenko y las autoridades separatistas de Donetsk y Lugansk se comprometieron frente a Rusia y a la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE) a avanzar hacia una resolución pacífica del conflicto armado que azota esa parte del país hace casi un año y medio y ya dejó más de 7.000 muertos.
Entre los principales puntos del memorando de paz firmado en Minsk, la capital bielorrusa, Kiev se comprometió a otorgar un “régimen especial” con mayor autonomía a las dos provincias sublevadas.
Eso es lo que aprobaron hoy las bancadas legislativas que forman la coalición de gobierno en Kiev con 265 votos de los 450 diputados que componen el Parlamento.
La de hoy fue apenas la aprobación de la primera lectura de la reforma, que ahora deberá enfrentar un largo proceso de votaciones artículo por artículo, en la que se necesitará el apoyo de al menos dos tercios del Parlamento, es decir, de 300 diputados.
Los grupos de extrema derecha y ultranacionalistas ucranianos que atacaron hoy a las fuerzas de seguridad en el Parlamento sostienen que el gobierno de Poroshenko está concediendo demasiado a las milicias separatistas del este del país y está entregando parte de la soberanía nacional.
Sin embargo, las autoridades separatistas de Donetsk y Lugansk también critican la reforma constitucional impulsada por el gobierno ucraniano y lo acusan de no cumplir con la autonomía real prometida en las negociaciones de Minsk.
Telám