Normalmente cuando compramos un Smartphone usado esperamos que el anterior dueño borre toda su información, fotografías, contactos, contraseñas y de más. Aunque si es nuevo sería lógico que viniera completamente vacío.
Por desgracia este no fue el caso de un usuario de iPhone, cuya historia fue compartida por un blogero británico. Al recibir el aparato que en teoría nadie había utilizado, ya que era nuevo, encontró algo bastante perturbador.
Cuando abrió la aplicación de la cámara, notó que en el recuadro donde aparecen las fotografías en la esquina inferior izquierda, aparecía el rostro de una persona muerta.
Lo curioso es que al intentar ver la fotografía, darle click y entrar a la carpeta de imágenes, el teléfono indicaba que no había ninguna imagen.
Hasta el momento nadie ha podido solucionar el problema o recuperar la fotografía, que es bastante perturbadora.
Excélsior
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