Los efectos del maltrato infantil pueden desencadenarse varios años después de haberlo vivido y las víctimas son más propensas a desarrollar enfermedades en etapa adulta, aseguró el psicoterapeuta Esteban Laso Ortiz.
El experto en Salud Mental del Instituto Tzapopan explicó que entre los principales efectos del maltrato infantil se encuentra la depresión y la ansiedad así como algunas enfermedades físicas como asma, diabetes y obesidad mórbida.
“Niños o niñas que podemos ver que sobreviven y salen adelante aparentemente sin haber sido afectados por la violencia, en realidad pueden tener una vulnerabilidad invisible que se manifiesta cuando aparece un desencadenante específico”, aseguró.
Al impartir un curso de capacitación a personal de la Red de Psicólogos del Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF) Jalisco, subrayó la importancia de tratar profesionalmente a las víctimas lo más pronto posible.
Aunque la violencia intrafamiliar no excluye edad, género y clases sociales, el psicoterapeuta manifestó que la violencia intrafamiliar es más frecuente en niveles de clase baja, en familias donde se presenta el hacinamiento, donde los miembros no tienen sus propios espacios y que no cuentan con redes sociales óptimas.
Laso Ortiz recomendó a los terapeutas de los sistemas DIF municipales y estatal ayudar a los padres de familia, principalmente las madres, debido a que son las que más frecuentemente maltratan a los menores de edad.
Ante ello, sugirió ayudar a las madres de familia para que reconozcan que la violencia que ejercen es una forma de manejar sus propias emociones, es decir, se sienten abrumados, con más problemas que soluciones.
“El primer paso indispensable para trabajar con la violencia y aunque suene contra el sentido común no es abordar la violencia, es fortalecer a la persona para que deje el uso de la violencia, significa ayudarla a tener como resolver sus problemas vitales de manera no violenta con la ayuda de otras personas”, señaló.
En Jalisco existen 41 Unidades de Atención a la Violencia Intrafamiliar en 38 municipios, donde un equipo interdisciplinario asesora a las familias que pudieran presentar esta problemática, la recomendación es acudir de manera inmediata para detectar, atender y evitar si algún integrante de la familia ejerce o es víctima de algún tipo de maltrato.
En el Consejo Estatal para la Prevención y Atención de la Violencia Intrafamiliar, se ofrecen asesorías integrales para madres y padres de familia receptores o generadores de violencia intrafamiliar mediante dos programas de atención: Mujeres por el Bienestar Familiar y Hombres en Construcción.
