Grupo Lala cuenta con los recursos necesarios para acelerar su crecimiento mediante una fusión o adquisición, la cual podría darse en menos de un año, anticiparon analistas.
La compañía, que comercializa productos en las categorías de leche, yogurt, queso, crema, jugos, mantequillas, entre otros, tiene un efectivo disponible por casi 10 mil millones de pesos, equivalentes al 13.3 por ciento de su valor de mercado.
Además, su perfil financiero es sano, pues su nivel de apalancamiento es negativo con un 1.5 veces su deuda neta/EBITDA.
“Esperamos fusiones o adquisiciones, la entrada a nuevos mercados e incursión en nuevas categorías, como alimentos, debido a su gran red de distribución en frío”, dijo José María Flores, analista de Ve por Más. Los especialistas expusieron que es probable que la compañía, encabezada por Eduardo Tricio, esté interesada en comprar alguna compañía latinoamericana.
“La empresa va a buscar adquirir alguna compañía”, coincidió Alberto Carrillo, analista de Signum Research, quien recordó que Grupo Lala ya ha crecido de manera inorgánica con la compra de Parmalat, en 2004, y la compra de la licencia para producir y comercializar algunos productos del portafolio de Nestlé en 2013.
Algunas empresas lácteas de la región latinoamericana en las que podría estar interesada son la colombiana Alpina, la brasileña Remil o Grupo Dánica, de Argentina.
En el primer trimestre de 2014, la empresa tuvo un crecimiento de 6.5 en ventas y de 7.5 en su flujo de operación, mientras que en todo 2013, reportó incrementos de 7 y 10.8 por ciento, respectivamente, comparado con lo obtenido en el 2012.
En los últimos cuatro años la compañía ha tenido crecimientos promedio en ventas de 7 por ciento y de 8 por ciento en el caso de su flujo operativo.
Por estos resultados y su perspectiva positiva, Lala es una de las empresas candidatas a integrarse al Índice de Precios y Cotizaciones de la Bolsa Mexicana de Valores (BMV) en su próxima revisión, en sustitución de Grupo Sanborn’s o Chedraui.
