Representantes de alrededor de 14 mil trabajadores pertenecientes a 10 secciones de Coahuila y Chihuahua del Sindicato Nacional Minero, dirigido por Napoleón Gómez Urrutia, anunciaron su salida de esa organización para crear su propio sindicato.
Aglutinados en la llamada Alianza Minera Nacional, los trabajadores dieron a conocer que a partir de este viernes 10 de octubre iniciarán las asambleas seccionales para formalizar esta decisión y en un lapso no mayor a un mes concluir el proceso.
En conferencia de prensa, cinco de los siete coordinadores de la Alianza afirmaron que con esta decisión se convertirán en el sindicato del sector más numeroso del país, pues las demás organizaciones, incluida la de Gómez Urrutia, tienen menos integrantes.
Héctor Jiménez Coronado, Héctor Villareal Galaviz, Oliverio López Ramos, Sergio Medina Ibarra y Joel Martínez sostuvieron que una vez concretada su salida y conformado su sindicato, disputarán la titularidad de los contratos colectivos de trabajo a la organización de Gómez Urrutia.
Sobre un eventual retorno a México de Napoleón Gómez Urrutia, quien vive en Canadá, los trabajadores disidentes dudaron de ello, al afirmar que “tiene miedo a la creciente desaprobación de los trabajadores”.
Argumentaron que en caso de regresar a México el próximo 11 de octubre para la conmemoración en Monterrey del aniversario luctuoso de su padre, Napoleón Gómez Sada, como afirman sus voceros, deberá enfrentar denuncias penales vigentes.
En su opinión, es falso que el dirigente sindical esté libre de toda acusación, pues al menos la Alianza Minera Nacional presentó denuncias penales en su contra desde el año 2010, acusándolo de robo de 14 millones de pesos, ante las cuales no se ha amparado.
Además, dijeron que aunque ha librado las demás acusaciones relacionadas con el fideicomiso de Cananea por 55 millones de dólares, aun no explica el paradero de 31 millones de dólares que no ha justificado ante ninguna autoridad, ni mucho menos ante los principales interesados que son los trabajadores.
Para los coordinadores de la Alianza Minera Nacional, Gómez Urrutia, quien ha vivido siempre a costa de los trabajadores sindicalizados, reformó estatutos para perpetuarse en el poder sindical y se atribuyó el derecho de veto a cualquier decisión que tomen los demás órganos directivos o incluso la base trabajadora.
Añadieron que en dichas reformas se adjudicó la competencia exclusiva para disponer de todos los bienes de la organización, incluidas las cuotas sindicales, con lo cual ha pagado a sus abogados y su estancia en Canadá, donde ha vivido casi una década.
NTX
