Al menos nueve meses antes de que se formara el fatal socavón en el Paso Exprés de Cuernavaca, que causó dos muertes el pasado 12 de julio, la Secretaría de Comunicaciones y Transporte (SCT) ignoró la petición de las constructoras de arreglar ese tramo.
De acuerdo con documentos a los que tuvo acceso Grupo REFORMA, la SCT recibió dos propuestas de reparación del drenaje del kilómetro 93 del Paso Exprés y en la zona aledaña donde se presentaban desbordamientos de aguas.
Desde el 29 de septiembre del 2016, el consorcio constructor, integrado por Epccor y Aldesem, propuso fortalecer el tubo de desagüe con un encamisado metálico y cemento, y, a la vez, realizar una perforación para desfogar el agua que se acumulaba en el punto.
La propuesta se hizo como alternativa a una obra de mayor calado que ofrecía la empresa, pero que la SCT no admitía debido a que implicaría detener la circulación en la autopista.
“En virtud de que la ampliación de la obra mencionada implica realizar excavaciones del orden de 12.0 metros sobre la autopista actual, situación que afecta a la circulación al tener que reducirla a un solo carril”, dice el oficio firmado por David Rodríguez, superintendente de obra del consorcio.
“Le sugerimos”, añade, “se haga un encamisado metálico por el interior del tubo existente y se rellene con lechada de cemento en espacio entre el tubo metálico y el interior del tubo existente y en la ampliación mantener el tubo metálico”.
El oficio fue dirigido a Josué Robles Rodríguez, residente de obra II de Carreteras Federales del Centro SCT Morelos.
“Es necesario incrementar el gasto de la obra”, precisa el texto. “Está pendiente se defina si se realiza una perforación dirigida para desfogar el agua que se acumula a un lado”.
La SCT no dio ninguna respuesta al oficio.
Un mes después, el 31 de octubre del 2016, el Subsecretario Ejecutivo de la Comisión Estatal de Agua de Morelos, Juan Anguiano, presentó en un oficio resultados de un estudio hidrológico en el kilómetro 93 del Paso Exprés.
El análisis sugería reemplazar el tubo por uno del doble de diámetro que el existente para mejorar el desagüe o bien abrir una alcantarilla y perfilar una pendiente.
En el oficio dirigido al delegado de la SCT, José Luis Alarcón, el funcionario estatal advierte que vecinos de Chipitlán pedían ampliar la alcantarilla de la barranca que cruza el libramiento, donde escurrían aguas negras y pluviales.
La SCT tampoco respondió a esta propuesta y el Presidente Enrique Peña inauguró la obra unos meses después, el pasado 5 de abril.
Los comentarios están cerrados, pero trackbacks Y pingbacks están abiertos.